PENSAMIENTO CENTRAL:  "Soy un creador poderoso".

MANTRA SÁNSCRITO:

“Om Kriyam Namah” – (Mis acciones están alineadas con las leyes del Universo)

MOMENTO DE CONSCIENCIA:

Hoy tómate un momento para observar una decisión antes de tomarla. Antes de tomar una decisión, pregúntate: "¿Es esta la opción más nutritiva para mí y todo el mundo a mi alrededor?”. Si la respuesta no se siente bien para ti, considera la posibilidad de tomar otra decisión. Si tu elección se siente bien en tu corazón, entonces procede con todo lo que eres.

PREGUNTAS DE REFLEXIÓN:

Como das, es que recibes. ¿Qué vibra quieres crear en el mundo hoy?

PENSAMIENTO CENTRAL: Yo soy mi más profundo deseo.

MANTRA SÁNSCRITO: “So Hum” – Yo soy

MOMENTO DE CONSCIENCIA:

Hoy es un nuevo comienzo, el primer paso en un viaje muy especial. Mientras viajas a través del día, tómate el tiempo para agradecerte a ti mismo y celebrar tu elección de vivir conscientemente y con entusiasmo. Con tu mente y corazón abierto, estás creando el espacio para manifestar la vida de tus sueños.

PREGUNTAS DE REFLEXIÓN:

• Cuál es tu respuesta a la pregunta del alma de hoy, "¿Quién soy yo?" A medida que escribes, permítete la libertad para explorar, sabiendo que no hay una respuesta equivocada a esta pregunta.

VELASCO, Piña Antonio
Tlacaélel: el azteca entre los aztecas.
1a. Ed., Porrúa
México, 2002.
336 p.

     En esta ocasión, les voy a compartir la manera en la que me hizo sentir este maravilloso libro. Evocó en mí maravillosos sentimientos de alegría, esperanza, amor por la vida hacia un bien superior a lo que concierne a los intereses individuales, magnificó en mí la suprema importancia de converger en intereses que impliquen el todo, porque somos parte de ese todo, y si nos vemos desde la perspectiva de ese todo, podemos tener una visión de nuestra participación en el bienestar de ese todo.

     El poner énfasis en el desarrollo propio del camino espiritual, es de vital trascendencia para nuestra alma, y al ser así podemos sumar activamente a un bienestar mayor. Lo descrito anteriormente, ha sido lo que ha despertado en mí al sumergirme en la lectura de esta apasionante historia.

     El escritor: Antonio Velasco Piña, hace de su narración una aventura mezclada con hechos históricos de una manera fluida, que te mantiene todo el tiempo con ganas de saber qué va a pasar.  He leído varios libros con narrativa histórica, sin embargo, resulta tedioso la manera en la que se hilan los hechos, pero no es el caso de Tlacaélel, ya que resulta fascinante la manera en la que el escritor ha entretejido los pasajes históricos de una impresionante civilización: los aztecas. La relación majestuosa que hace entre los personajes importantes de la historia como: Moctezuma I, Chimalpopoca, Itzcoatl, Axayácatl y Tlacaélel.

     Tlacaélel, el Azteca entre los Aztecas cuenta la historia de un joven azteca que recibe el emblema sagrado de Quetzalcóatl y asienta las bases espirituales y de auge del pueblo azteca.  La novela te lleva por el glorioso pasado de la gran capital México - Tenochtitlan (antes de su conquista y exterminio). Tlacaélel busca incansablemente unificar al pueblo azteca con una cosmovisión heredada de la extinta y gloriosa cultura tolteca, un hombre de espíritu inquebrantable que inspiró y dió fortaleza a la cultura azteca. Desde la creación de una nueva forma de gobierno basada en principios supremos, encaminados al dominio de sí mismo en primer lugar, para sentar las bases de un camino espiritual elevado.

"Así como el Caballero Tigre era la representación del ser que es ya dueño de sí mismo y que se halla al servicio de sus semejantes, el Caballero Águila simbolizaba la conquista de la más elevada de las aspiraciones humanas: la superación del nivel ordinario de conciencia y la obtención de una alta espiritualidad".

 Cada capítulo es un pasaje histórico narrado magistralmente, una manera de acercarse a la historia de una de las culturas prehispánicas más importantes en México, de manera amigable, y me atrevería a decir que "adictiva". 

A manera de resumen de manera poética, este libro me ha inspirado el siguiente poema:

¡Felices lecturas!